Rozonda Salas

A continuación, os ofrecemos una entrevista que realizó Tarot Lamatista a Rozonda Salas

¿Tienes antecedentes de tarotistas en tu entorno familiar o cercano?.

En realidad no. De hecho mi familia es bastante escéptica sobre estos temas y en un principio no vieron muy bien que me dedicara al Tarot, hasta que vieron que no me cambiaba y no me perjudicaba y que me hacía feliz. Hoy día están contentos de ver que hago algo que me gusta.

¿Cómo fueron tus inicios con el Tarot?

Pues fue pura casualidad. Un día, hace ya unos 20 años o así, pasé por una librería que estaba liquidando existencias y había una baraja que costaba 100 pesetas de entonces(en la pregunta 4 te indico cual es) Yo había oído hablar del Tarot, no sabía mucho de ello, y se me despertó la curiosidad. La compré, empecé a practicar,a aprender, a leer y a estudiar, y rotundamente caí bajo la fascinación del Tarot. Cuando descubrí el tarot Rider Waite, el flechazo fue definitivo.

 ¿Cómo lo sientes (El Tarot)?

Como un amigo y como una fuente inagotable de conocimiento. No entiendo como hay gente que le puede tener miedo, cuando es un canal para la imaginación, la intuición, un consejero bien intencionado al que eres libre de escuchar o no. Y su riqueza estética y cultural es inagotable. Cuando crees que conoces bien el Tarot, siempre te sorprende.

¿Cuál fue tu primer mazo y como llego a tus manos?

Pues fue el que compré en esa librería que he mencionado, El Gran Tarot Esotérico de Maritxu Guler. Publicado por Heraclio Fournier. Es una baraja extraña y fascinante, tipo Marsella, que despertó totalmente mi curiosidad.

¿Cuál es tu carta favorita?

R: La Estrella. En parte por su mensaje de esperanza, y en parte porque mucha gente me ha dicho que me ven reflejada en esa carta, porque doy esperanza sin halagar ni engañar. Me gustaría creer que es así.

¿Cuál es la tirada que más te gusta interpretar?

Me gustan las tiradas sencillas, claras, de pocas cartas, que el consultante puede seguir con facilidad. Hay una tirada de nueve cartas que ofrezco a muchos de mis clientes, muy adaptable, en la que se pueden ver tres aspectos de una situación o hacer tres preguntas cortas. Me gusta mucho porque es muy completa sin ser complicada.

Escribir un libro es una aventura ¿Cómo surgió la tuya?

Bueno, fue a causa de mi blog rozondasalas.es— tuvo mucho éxito, la gente dijo que aprendía mucho y se me ocurrió editar y pulir los contenidos que ofrecía, añadirles cosas nuevas y publicarlos en dos libros, Tarot Libro Abierto 1 y 2. Tuvieron mucho éxito y eso me animó a escribir otro, Escuela de Amor, en el que interpretaba el Tarot orientado a temas de amor. Estoy escribiendo la segunda parte que saldrá en 2016. Siempre me ha gustado escribir. También he publicado un libro de haikus inspirados en las 78 cartas, Del Polvo a las Estrellas, y he contribuido a antologías de prosa y verso en inglés sobre Tarot.

En tu experiencia ¿Qué situación y/o pregunta te han parecido más curiosas?

Uf, en tantos años dedicada al tarot (13 como amateur y 7 como profesional) ha habido de todo! Gente que me ha preguntado quien va a ganar la Liga, pedido orientaciones para hallar objetos perdidos, consejos para jugar en bolsa…sería inacabable.

¿Cualquiera puede ser intérprete de Tarot?

Pienso que sí. No hay que ser psíquica ni vidente, solo tener algo de intuición y manejar las cartas con la mente abierta. Eso sí, si te quieres dedicar profesionalmente o medio en serio, hay que estudiar -no tanto memorizar significados, sino aprender mucho sobre cada carta- leer, trabajar y practicar mucho con diversas barajas…esa es mi experiencia. Todos los trabajos requieren preparación y práctica para ser mejor.

Un libro imprescindible .

Yo leo en inglés, por eso muchos de mis libros de cabecera sobre Tarot están en esta lengua, como la obra de Mary K. Greer, Marcus Katz y Tali Goodwin o Rachel Pollack. Los 78 grados de Sabiduría de esta última si están en castellano, y es el libro más bello y erudito de Tarot que conozco.

Una recomendación .

Acercarse al Tarot sin miedo, sin supersticiones ni ideas preconcebidas, y escuchar sus consejos sin desechar nuestro propio sentido común y recordando que somos dueños de nuestra vida y decidimos nosotros. Así le sacaremos el máximo partido.